Las olas se
equivocaron de mar,
quisieron
refrescar el cielo
y bañar las
azoteas.
Se hicieron
espuma
para limpiar la
deriva de las almas.
Se hicieron
merengue y nata
y endulzaron los
querubines celestes.
No encontraban
el mar, se equivocaron
y confundieron
los puntos cardinales,
no siempre el
Norte nos indica el camino.
¿Y si llueven
olas?
¿Ahogarán la
derrota y el infortunio?
¿Ahogarán el
miedo y el fracaso?
¿Y si llueve
espuma?
¿Limpiará el
mundo de todo lo malo?
¿Y si llueven
merengue y nata?
Si llueven
merengue y nata
sabré que me
mojarán tus besos.
ResponderEliminarMerche, me rindo a tus pies. Esto no es llevar la poesía dentro, es SER poesía. De ese cielo que efectivamente parece mal tejes una fantasía mágica, crítica para acabar con esos dos versos que son un poema de amor. Impresionada con este poema, Merche. Así estoy.
Besitos y toda mi admiración
Jajaja... Es la primera vez que alguien se rinde a mis pies!!! Qué afortunada soy!!
ResponderEliminarMuchas gracias, preciosa, por tus palabras. Me alegro que te haya gustado.
Cienes y cienes de besos ;)