¿No ves, el día, qué bello?
Ya amaneció sin nubes,
sin sombras, sin miedos,
ya en la fuente canta el agua
y los pájaros en el cielo,
corazones afligidos
recibieron su consuelo.
Niña, ¿no ves la risa?
¿No ves, el día, qué bello?
El destino se ha parado
a jugar conmigo en el suelo.
El sol ha secado los charcos
y la desdicha, con ellos.
Mira, que los días terribles
se fueron.
Niña, toma esta biznaga
para ponerla en tu pelo.
CARCAJADAS
Hace 3 horas
El poema es aún más bello que el día.
ResponderEliminarBesos.
bello poema,niña!
ResponderEliminar(y juguemos rayuela con la biznaga en el pelo!)
mil besos*
- Gracias, Torito, pero el día debe ser siempre más bello aún que cualquier poema. Besitos para un bello amigo.
ResponderEliminar- Gracias, Rayu, juguemos, sí, juguemos... Miles y más besos.
Síii!!! Da gusto leerte así, por lo bello que es el poema y por lo alegre que se te percibe.
ResponderEliminarSiempre llegan días bellos que nos hacen olvidar los malos. Hay que confiar en ellos.
Besitos
Gracias, amiga. Te vienes a jugar con nosotras?
ResponderEliminarBesitos