No quiso el sol salir,
lo busqué entre las nubes
buceando entre gotas
de amor húmedo,
pero no lo vi;
lo busqué en tu mirada
perdida en la pupila del tiempo,
pero no lo vi;
lo busqué en tus palabras
mudas y ausentes,
pero no lo vi.
No quiso el sol salir
y aquella mañana
se pintó de gris,
y mis sábanas blancas
me hablaron e ti,
y mis manos desnudas
lloraron por ti.
No quiso el sol salir,
aquella mañana
se marchó contigo,
como un desertor cobarde,
me dejaste sola
y sin un abrigo
y mi cuerpo frío
tembló con tu adiós,
te llevaste todo,
me quedé sin sol.
MANICOMIO 237
Hace 4 horas
Hay personas que son como soles en nuestras vidas.
ResponderEliminarPero debemos aprender a saber vivir con el otro sol.
Por si la cosa no resulta, es triste pero es la realidad.
Duele mucho la vida y algunas situaciones.
Besos corazón!
Cada ocaso, un sol... cada amanecer un sol... la vida no se detiene...
ResponderEliminarbesos
- Carla Peterson: Siempre aprender a vivir, siempre. Buscando soles. Besos.
ResponderEliminar- De cenizas: La vida sigue porque siempre sale el sol. Besos.
Nos pasamos la vida girando alrededor de un sol y creemos que es el único. Pero hay más soles en el universo. Sólo hay que cambiar de órbita
ResponderEliminarBesitos
Alís, me ha encantado tu comentario por lo que dices y por cómo lo dices.
ResponderEliminarMil besos como mil soles.