Hoy no he sabido cómo mirarte,
tenía tanto que decirte,
tanto que contarte.
Y el silencio ha guardado
mis pensamientos.
El silencio, mi aliado
de tantos momentos...
Hoy no he sabido cómo decirte
lo que mi corazón destrozado
guardaba con empeño,
-la pena es una palabra muy grande
para un cuerpo tan pequeño-.
Hoy no he sabido cómo besarte
si con ternura o desenfreno,
apenas rozarte con mi boca en tu cuerpo
o morderte palmo a palmo
con lujurioso celo.
Hoy, por no saber,
no he sabido ni cómo amarte.
tenía tanto que decirte,
tanto que contarte.
Y el silencio ha guardado
mis pensamientos.
El silencio, mi aliado
de tantos momentos...
Hoy no he sabido cómo decirte
lo que mi corazón destrozado
guardaba con empeño,
-la pena es una palabra muy grande
para un cuerpo tan pequeño-.
Hoy no he sabido cómo besarte
si con ternura o desenfreno,
apenas rozarte con mi boca en tu cuerpo
o morderte palmo a palmo
con lujurioso celo.
Hoy, por no saber,
no he sabido ni cómo amarte.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu mensaje, así sabré que has estado aquí. Gracias.